Existen varios tipos de lentes de contacto, diseñados para adaptarse a diferentes necesidades visuales y preferencias de los usuarios. Aquí están algunos de los tipos más comunes:
- Blando - Corrección visual
Material: Elaborados de polímero flexible. Como su nombre lo dice, es muy suave.
Adaptabilidad: Brinda comodidad instantánea, es decir, es muy sencillo adaptarse a ellos. Ideales para usuarios principiantes o con ojos sensibles.
Permeabilidad al oxígeno: Buena permeabilidad al oxígeno, pero inferior a los rígidos.
Corrección visual: Pueden corregir la miopía, hipermetropía, astigmatismo y presbicia.
Vida útil: Disponibles en versiones desechables (diarias, semanales, quincenales, mensuales).
- Rígido RGP (Rígido Gas Permeable) – Corrección visual
Material: Elaborados de materiales rígidos. Es más pequeño y rígido
Adaptabilidad: Pueden ser incómodos inicialmente, pero mejoran con el tiempo a medida que el ojo se adapta, o sea que requiere un periodo de adaptación más largo que los blandos.
Permeabilidad al oxígeno: Excelente permeabilidad al oxígeno.
Corrección visual: Ofrecen una corrección visual más precisa, especialmente para astigmatismos irregulares.
Vida útil: Duran más tiempo, generalmente de 1 a 2 años con el cuidado adecuado.
- De color – Cambio de la apariencia del ojo con o sin corrección visual.
Características: Los lentes de color contienen tintes o pigmentos especiales que cubren total o parcialmente el iris del ojo. Hay lentes opacos que cubren completamente el color natural del iris, y lentes realzadores que simplemente realzan o intensifican el color existente.
Adaptabilidad: Generalmente, los lentes de color se recomiendan para uso ocasional o por períodos limitados, ya que pueden causar más incomodidad o sequedad ocular que los lentes regulares.
Corrección visual: Los lentes de color pueden ser con corrección óptica para tratar problemas de visión, o sin corrección, solo para cambiar el color del ojo.
Permeabilidad al oxígeno: Al igual que los lentes de contacto regulares, los de color deben permitir el paso adecuado de oxígeno hacia la córnea para mantener la salud ocular.
¿Cómo usar los lentes de contacto?
- Antes de abrir un paquete de lentes de contacto es preciso verificar la graduación si es el caso y la fecha de caducidad.
- Debes sacarlos del empaque e inspeccionar que no tengan rayas, rupturas o deformaciones.
- Colócalos en la palma de la mano con solución especial para lentes de contacto. Se frotan suavemente con la yema de los dedos. Verifica que lo estés poniendo del lado correcto, debe ser una forma redonda y no de cono.
- Para introducirlos al ojo ayúdate de un espejo para verificar los movimientos. Puedes usar el chupón para colocarlo. Primero jala el párpado inferior y acerca el lente a la esclera (parte blanca del ojo) y parpadea varias veces para eliminar las burbujas y que el lente quede centrado. Es normal sentir algo de incomodidad o visión borrosa al principio. Permita que sus ojos se adapten durante unos minutos.
- Para retirarlo, no es recomendable usar el chupón. Debes hacer un movimiento de pinza con los dedos índice y pulgar, previamente limpios.
- Debes almacenarlos en su estuche con solución nueva. Nunca los guardes en seco. Los estuches no deben lavarse debes cambiar el estuche periódicamente para que no se contamine.
- Cambia la solución de los estuches cada día y asegúrate que el lente esté bien sumergido en la solución.
Es importante seguir las recomendaciones del fabricante en cada producto que utilices, así como las revisiones periódicas con tu optometrista.
Recomendaciones generales
- Higiene: Antes de manipular los lentes de contacto debes lavar muy bien tus manos. Si accidentalmente se caen al suelo u otra superficie no deben volver a colocarse en los ojos sino desecharlos. Las superficies donde caen los lentes a menudo albergan gérmenes y bacterias que podrían adherirse a la lente y luego introducirse en el ojo.
- Descanso: No dormir con lentes de contacto puestos. Tu córnea debe tener periodos de respiración natural y por eso el descanso de los lentes es imprescindible, además de que dormir con ellos aumenta tu posibilidad de contraer infecciones. ¡Te toma menos de 1 minuto retirarlos y vale la pena!
- Contacto con agua: No bañarse con ellos, ni ponerse en contacto con el agua en general. El agua no es un desinfectante y esto es una invitación a los microorganismos a crecer en ellos e infectar tu ojo, además de que el agua puede deformar la superficie de los lentes de contacto.
- Almacenamiento: Cada que guardes tus lentes de contacto debes ponerlos en su estuche y sumergirlos en la solución especial, nunca en otro líquido que no sea el especial para ese uso.
- Uso de herramientas: No usar chupón para retirar las lentillas pues puede lastimar tu ojo; ésta herramienta debe usarse sólo para colocarlo.
- Advertencias e instrucciones: Sigue las instrucciones del fabricante en cuanto a la duración, sin embargo, si has perdido la cuenta de los días, lo notarás en la rigidez de estos y en la incomodidad que provocan ya que con el tiempo se van volviendo más duros.
- Alternancia: Descansar de los lentes de contacto. Es recomendable usar anteojos 2 veces por semana.
- Uso de cosméticos y aerosoles: Aplique cosméticos y aerosoles antes de colocar los lentes de contacto para evitar que entren en contacto con los ojos.
- Atención a síntomas: Si experimenta enrojecimiento, ardor, visión borrosa o cualquier molestia, retire las lentes de inmediato y consulte a su profesional.
- Reemplazo en caso de enfermedad: No use lentes de contacto si tiene una enfermedad ocular o sistémica que pueda afectar los ojos.
- Seguimiento profesional: Acuda a las revisiones periódicas recomendadas por su oftalmólogo u optometrista para garantizar la salud ocular.
¿Qué tipos de gotas se requieren cuando usas lentes de contacto?
Al usar lentes de contacto no puedes usar cualquier tipo de gotas que se ofrecen en el mercado, debes usar gotas específicas para usuarios dependiendo el propósito:
- Solución desinfectante/multipropósito: Estas soluciones se utilizan para desinfectar, limpiar y humedecer las lentes de contacto. Eliminan gérmenes, proteínas y otros depósitos. Son esenciales para un cuidado higiénico de las lentes. Generalmente la solución tiene eficacia desinfectante por 30 días. Si usas tus lentes a diario, la solución que usas para el porta lentes debe cambiarse todos los días.
- Solución humectante/gotas de humectación: Estas gotas se usan para hidratar y lubricar los ojos mientras se usan lentes de contacto. Ayudan a aliviar la sensación de sequedad ocular y la incomodidad.
- Gotas lubricantes: Similares a las gotas humectantes, pero con una fórmula más espesa y duradera. Brindan alivio prolongado para ojos secos o irritados.
- Gotas descartables/de enjuague: Se utilizan para enjuagar los lentes después de la desinfección y antes de insertarlos. Ayudan a eliminar cualquier residuo de la solución desinfectante.
- Gotas antihistamínicas/antialérgicas: Pueden ayudar a aliviar los síntomas de alergias oculares, como enrojecimiento, picazón o lagrimeo excesivo.